domingo, 18 de octubre de 2009

LOS ARHUACOS.

LOS ARHUACOS.
Ika o Ijka, son un pueblo amerindio que habita la vertiente meridional de la Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia. Son aproximadamente 9 mil personas que habitan esa área. Su territorio tradicional llegaba mucho más abajo que los límites actuales del resguardo y del poblamiento Arhuaco, hasta la llamada línea negra imaginaria, que encierra varios de los sitios sagrados a los cuales siguen acudiendo los indígenas a hacer sus ofrendas o pagamentos.

Son un pueblo profundamente espiritual y conocedor de su propia filosofía, que tiene un carácter globalizante. Creen en la existencia de un Creador y Gran Padre, Kakü Serankua, del cual provinieron los primeros dioses y seres materiales, otros padres como el sol y los nevados y otras madres como la tierra y la luna.

Entienden a la Sierra como el ombligo del mundo, desde el cual se originó en las diferentes piedras. Los Mamo, autoridades espirituales, encarnan el seguimiento a la Ley tradicional.
Consideran la Sierra Nevada de Santa Marta como "Tierra de Sabios", tierra de inocencia, tierra de humildad. La tienen demarcada alrededor y la miran desde tres puntos de vista. Hay una circunferencia interna que conocen como seinekan (Madre Tierra), una segunda circunferencia mannekan (Tierra Blanca) y una tercera circunferencia que denominan bunnekan (Tierra Roja).

Dentro de esos tres círculos está el conocimiento sobre la tierra, el conocimiento sobre la cosmogonía y el conocimiento sobre el infinito. La consideran no de su exclusiva propiedad, sino que la cuidan para servicio del planeta, ya que cada fenómeno extraño que ocurre en la Sierra es algo que está viviendo el planeta.

La cuidan, dicen, para sus “hermanos menores”, o sea el hombre blanco. Valoran en gran medida el silencio, especialmente en sus templos o kankurwas, mientras los ancianos transmiten el conocimiento ancestral a los niños y niñas.

REFLEXIONES DEL COMPAÑERO ALJURE: Desde la primera incursión armada de los mal llamados Conquistadores, se manifestó el espíritu guerrero y libertario de los habitantes naturales de estas tierras de América.

Conocedores de la resistencia guerrera de los nativos, los Conquistadores a pesar de haber masacrado a millones de aborígenes jamás lograron doblegar el espíritu de quienes con sabiduría se escondieron en regiones selváticas de difícil acceso para el Conquistador, sobreviviendo hasta la actualidad sin haber sido avasallados por los imperios. Esos entupidos Conquistadores consideraron y trataron al Indio como a una horda de salvajes primitivos, cuya única razón, según ellos, era la de nacer, crecer, reproducirse y morir como animales del bosque, desconociendo y menospreciando su inteligencia, su altamente elaborada organización social y religiosa, la cual durante siglos les ayudo a estar presentes en nuestra aberrada y desorganizada civilizacion para poder enseñarnos su hermoso legado. Descubramoslo ...

By: Alberto Aljure Moreno.






















miércoles, 7 de octubre de 2009

LA NOCHE TRISTE - LA NOCHE EN QUE LOS INDIOS VENCIERON AL IMPERIO.



LA NOCHE TRISTE - LA NOCHE EN QUE LOS INDIOS VENCIERON AL IMPERIO.
La principal característica de esta llamada noche triste es la derrota que tuvieron Hernán Cortés y sus tropas por parte de guerreros aztecas en una noche de la que hoy es la Ciudad de Méjico, antigua Tenochtitlan, el 30 de junio de 1520.
Los hechos tuvieron su evolución a partir de la llegada de Hernán Cortés y su ejército a la capital del imperio azteca el 8 de noviembre de 1519 en la cual lo esperaba el emperador Moctezuma II y la realeza azteca. Hasta allí transcurrió todo con normalidad y agasajos tanto de una como de la otra parte.

Al encontrarse un gran tesoro en el lugar donde se hospedaban, si bien Cortés se habría negado a realizar cualquier acción delincuencial se temía por la avaricia que podía darse en la tropa española.
Los hechos se van desencadenando hasta que finalmente se toma prisionero a Moctezuma junto a unos indígenas de una tribu cercana que estaba enemistada con Moctezuma en virtud de los tributos que se le cobraba a esa comarca por parte del imperio azteca. Los españoles entonces aprovecharon una vez más la división existente entre los americanos para capturar al emperador azteca y lograr así su objetivo de apropiarse de las riquezas existentes.
En este proceso se dieron una serie de hechos y escaramuzas en las que murieron españoles e indígenas lo que aumentó los niveles de tensión ya existentes y que fue aprovechado además por los españoles para establecer un móvil o motivo para entablar el conflicto. Es decir, se necesitaba una excusa para aniquilar a los indios y robarles y para ello se buscaron motivos. Pero la realidad era que el tener prisionero a Moctezuma y los nobles aztecas garantizaba de alguna forma la tranquilidad de los mexicas que podían atacarlos en cualquier momento y que además eran más numerosos. La otra ventaja que tenían los españoles era que los aztecas los consideraban dioses y en función de eso los respetaban.
Sin embargo la rebelión no tardó cuando ya eran demasiadas las evidencias reales de las falsas divinidades y la situación que se vivía y en determinado momento ya ni siquiera sirvió más Moctezuma como garantía ya que los nativos lo terminaron viendo como un traidor cómplice de los invasores.
Al no ser más útiles tanto Moctezuma como el resto de rehenes habrían sido asesinados por los españoles. De esta forma Cuitláhuac lo sucedió como gobernante y guerrero. A partir de allí el nuevo emperador comenzó una campaña para destruir a los españoles alistando tropas, estableciendo alianzas con pueblos cercanos. Más tarde muere víctima de una enfermedad viral.
La situación fue empeorando para los españoles que aferrados a sus tesoros y junto a los indios aliados con los que contaban resistían en el palacio de Axayácatl los embates de los mexicas. Fue entonces que decidieron escapar en la noche del 30 de junio de 1520.
De nada sirvió el silencio y lo sigilosos que fueron en su intento de huída ya que en la noche pudieron ser descubiertos y atacados por miles de aztecas embravecidos desde el templo de Huitzilopochtli. Fue en la misma laguna donde con canoas intentaban la fuga que fueron atacados por nativos con lanzas y flechas. Por otra parte desde tierra firme otros miles de aztecas atacaban la retaguardia mientras que otros interceptaron los puentes.
Fue triste la noche para los españoles invasores que fueron masacrados en esa instancia más allá que algunas leyendas señalan que muchos se pudieron salvar y que miles fueron muertos en batalla. Otros cuentos destacan que fueron los que escaparon sin tesoros los que lograron salvar su pellejo mientras que los más ambiciosos murieron ricos allí mismo.
Al parecer Cortés logró salvarse pero los relatos lo describen profundamente deprimido y triste por haber perdido su sueño de conquistar Tenochtitlán y de haber perdido más de la mitad de su ejército.
Pero lo cierto es que los que lograron escapar pudiendo llegar hasta una aldea aliada (Tlaxcala) con los días no sin enfrentarse antes a los aztecas nuevamente en la batalla de Otumba y luego de un tiempo, más de un año, los españoles lograron finalmente la conquista de la gran capital azteca de la mano de tribus aliadas que en su arremetida contra la en ese momento ciudad gobernada por Cauthémoc mataron más de 40 mil mexicas en la conquista de Ciudad de México – Tenochtitlan
Hernán Cortés, en la Segunda carta de relación al emperador Carlos V, sobre la salida de la ciudad. [...] Y fui a la fortaleza, y hice hacer una puente de madera, que llevaban cuarenta hombres; y viendo el gran peligro en que estábamos y el mucho daño que cada día los indios nos hacían, y temiendo que también deshiciesen aquella calzada como las otras, y deshecha era forzado morir todos, y porque de todos los de mi compañía fui requerido muchas veces que me saliese, e porque todos o los más estaban heridos, y tan mal que no podían pelear, acordé de lo hacer aquella noche, e tomé todo el oro y joyas de vuestra majestad que se podían sacar, y púselo en una sala, y allí lo entregué en ciertos líos a los oficiales de vuestra alteza, que yo en su real nombre tenía señalados y a los alcaldes y regidores, y a toda la gente que allí estaba, les rogué y requerí que me ayudasen a lo sacar y salvar, e di una yegua mía para ello, en la cual se cargó tanta parte cuanta yo podía llevar; e señalé ciertos españoles, así criados míos como de los otros, que viniesen con el dicho oro y yegua, y los demás los dichos oficiales y alcaldes regidores y yo los dimos y repartimos por los españoles para que lo sacasen. E desamparada la fortaleza, con mucha riqueza así de vuestra alteza como de los españoles y mía, me salí lo más secreto que yo pude, sacando conmigo un hijo y dos hijas del dicho Muteczuma, y a Cacamacín, señor de Aculuacan, y al otro su hermano, que yo había puesto en su lugar, y otros señores de provincias y ciudades que allí tenía presos. E llegando a las puentes, que los indios tenían quitadas, a la primera dellas se echó la puente que yo traía hecha con poco trabajo, porque no hubo quien la resistiese, excepto ciertas velas que en ella estaban, las cuales apellidaban tan recio, que antes de llegar a la segunda estaba infinito número de gente de los contrarios sobre nosotros, combatiéndonos por todas partes, así desde el agua como de la tierra; e yo pasé presto con cinco de caballo y con cien peones, con los cuales pasé a nado todas las puentes, y las gané hasta la tierra firme. E dejando aquella gente en la delantera, torné a la rezaga, donde hallé que peleaban reciamente y que eran sin comparación el daño que los nuestros recibían, así los españoles como los indios de Tascaltecal que con nosotros estaban; y así, a todos los mataron, y a muchos naturales, los españoles; e asimismo habían muerto muchos españoles y caballos, y perdido todo el oro y joyas y ropa y otras muchas cosas que sacábamos, y toda el artillería. Y recogidos los que estaban vivos, echélos delante, y yo, con tres o cuatro de caballo y hasta veinte peones, que osaron quedar conmigo, me fui en la rezaga, peleando con los indios hasta llegar a una ciudad que se dice Tacuba que está fuera de toda la calzada, de que Dios sabe cuánto trabajo y peligro recibí; porque todas las veces que volvía sobre los contrarios salía llenos de flechas y viras y apedreado; porque como era agua de la una parte y de la otra, herían a su salvo sin temor a los que salían a tierra; luego volvíamos sobre ellos, y saltaban al agua; así, que recibían muy poco daño si no eran algunos que con los muchos estropezaban unos con otros y caían, y aquellos morían. Y con este trabajo y fatiga llevé toda la gente hasta la dicha ciudad de Tacuba, sin me matar ni herir ningún español ni indio, sino fue uno de los de caballos que iba conmigo en la rezaga, y no menos peleaban, así en la delantera como por los lados, aunque la mayor fuerza era en las espaldas, por do venía la gente de la gran ciudad.
Francisco López de Gómara, en Historia de la conquista de México, Capitulo CX: Como Huyo Cortes de Mexico (Gomara no estuvo en el Nuevo Mundo, pero fue capellán de Hernan Cortes y recogió testimonios sobre la Conquista). [...] Echó Cortés por la calzada de Tlacopan, por la que habían entrado, y todos le siguieron; pasaron el primer ojo con el puente artificial que llevaban. Los centinelas de los enemigos y los guardas del templo y ciudad sonaron entonces sus caracolas y dieron voces que se iban los cristianos; y en un salto, como no tienen armas ni vestidos que echar encima y los impidan, salió toda la gente tras ellos con los mayores gritos del mundo, diciendo: “¡Mueran los malos, muera quien tanto mal nos ha hecho!”. Y así, cuando Cortés llegó a echar el pontón sobre el segundo ojo de la calzada, llegaron muchos indios que se lo impedían peleando; pero, al fin, hizo tanto que lo echó y pasó con cinco de a caballo y cien peones españoles, y con ellos aguijó hasta la tierra, pasando a nado los canales y quebradas de la calzada, pues su puente de madera ya estaba perdido. Dejó los peones en tierra con Juan Jaramillo, y volvió con los cinco de a caballo a por los demás y a meterles prisa para que caminasen; pero cuando llegó a ellos, aunque algunos peleaban intensamente, halló muchos muertos. Perdió el oro, el fardaje, los tiros y los prisioneros; y en fin, no halló hombre con hombre ni cosa con cosa de como lo dejó y sacó del real. Recogió a los que pudo, los echó delante, siguió tras ellos y dejó a Pedro de Albarado para animar y recoger a los que quedaban; mas Albarado, no pudiendo resistir ni sufrir la carga que los enemigos daban, y mirando la mortandad de sus compañeros, vio que no podía él escapar si atendía, y siguió tras Cortés con la lanza en la mano, pasando sobre españoles muertos y caídos, y oyendo muchas lástimas. Llegó al último puente y saltó al otro lado sobre la lanza. De este salto quedaron los indios espantados, y hasta los españoles, pues era grandísimo, y otros no pudieron hacerlo, aunque lo probaron, y se ahogaron. Cortés, entonces, se paró, y hasta se sentó, y no a descansar, sino a hacer duelo sobre los muertos y los que quedaban vivos, y pensar y decir el golpe que la fortuna le daba con perder tantos amigos, tanto tesoro, tanto mando, tan grande ciudad y reino; y no solamente lloraba la desventura presente, sino que temía la venidera, por estar todos heridos, por no saber adónde ir, y por no tener segura la guarida y amistad en Tlaxcallan; y ¿quién no llorara viendo la muerte y estrago de aquellos que con tanto triunfo, pompa y regocijo habían entrado? Empero, para que no acabasen de perecer allí los que quedaban, caminando y peleando llegó a Tlacopan, que está en la tierra, fuera ya de la calzada. Murieron en el desconcierto de esta triste noche, que fue el 10 de julio del año 20 sobre 1500, cuatrocientos cincuenta españoles, cuatro mil indios amigos, cuarenta y seis caballos, y creo que todos los prisioneros. Quién dice más, quién menos; pero esto es lo más cierto. Si esto hubiese sido de día, quizá no murieran tantos ni hubiera tanto ruido; mas como pasó en noche oscura y con niebla, fue de muchos gritos, llantos, alaridos y espanto; pues los indios, como vencedores, voceaban victoria, invocaban sus dioses, ultrajaban a los caídos y mataban a los que en pie se defendían. Los nuestros, como vencidos, maldecían su desastrada suerte, la hora y quien allí los llevó. Unos clamaban a Dios, otros a Santa Maria, otros decían: “Ayuda, ayuda, que me ahogo”. No se sabría decir si murieron tantos en agua como en tierra, por querer echarse a nado o saltar las quebradas y ojos de la calzada, y porque los arrojaban a ella los indios, no pudiendo vencerlos de otra manera. Y dicen que al caer el español en el agua, era con él el indio, y como nadan bien, los llevaban a las barcas y a donde querían, o los desbarrigaban. También andaban muchas calles a raíz de la calzada, peleando, y, como tiraban a bulto, daban a todos, aunque algo divisaban el vestido de los suyos, que parecían encamisados, y eran tantos los de la calzada, que se derribaban unos a otros al agua y a la tierra; y así, ellos se hicieron a sí mismos más daño que los nuestros, y si no se hubiesen detenido en despojar a los españoles caídos, pocos o ninguno dejaran vivos. De los nuestros tanto más morían cuanto más cargados iban de ropa, oro y joyas, pues no se salvaron más que los que menos oro llevaban y los que fueron delante o sin miedo; de manera que los mató el oro y murieron ricos. Cuando acabaron de pasar la calzada no siguieron los indios a nuestros españoles, o porque se contentaron con lo hecho, o porque no se atrevieron a pelear en lugar anchuroso, por ponerse a llorar a los hijos de Moctezuma, que hasta entonces nunca los habían conocido ni sabido que fuesen muertos. Grandes llantos y lamentaciones hicieron sobre ellos, mesándose la cabellera por haberlos matado ellos.

lunes, 5 de octubre de 2009

CRONOLOGÍA DE LAS TRAICIÓNES PARA LA PAZ EN COLOMBIA


CRONOLOGÍA DE LAS TRAICIÓNES PARA LA PAZ EN COLOMBIA

Las siguientes líneas tienen la intención deve­lar lo absurdo de la guerra civil colombiana, la cual nunca ha sido declarada por ningun gobierno de ese Pais, develar su lógica perversa que hoy no sólo es anacrónica, sino que degeneró hasta la aberración y el delirio de la violencia y el genocidio, bajo la lógica imperial de la otrora “Doctrina de la Seguridad Nacional”, que deri­vó hacia la “Doctrina de Guerra Preventiva” o doctrina Bush y las aplicaciones de ella.
Arribamos a una conclusión que nos atrevemos a plantear como hipótesis de lec­tura: En primer termino entender que el conflicto Colombiano debe ser arrancado de la visión militar y militarista, del planteamiento de otorgar o no la beligerancia a las organizaciones guerrilleras, a favor de un desenlace que es el Acuerdo Humanitario. O, dicho en otras palabras, la “Regulari­zación de la guerra” mediante el reconocimiento del valor de la vida, con el único objetivo de negar y quitar fuerza a la lógica de la muerte y en segundo lugar poder ver la historia desde el principio y no desde el presente y porque no decirlo desde hace unos pocos años.
Colombia es uno de los países más violentos del mundo, se trata de una conducta social que se ha mantenido a lo largo de su his­toria. En el fondo del conflic­to histórico Colombiano está la realidad de una clase dominante, más no dirigente, vinculada fundamentalmente al latifundismo, que ha perpetuado su preeminencia a partir de cuatro elementos cen­trales:
1. La alianza antinacional con las potencias imperiales hegemó­nicas de cada etapa histórica. 2. La vinculación de la eco­nomía al modelo agro y mono ex­portador, a partir de la produc­ción de diversos rubros, tales como añil, tabaco, cueros, café, entre otros, siempre en dependencía de los intereses económi­cos de la potencia dominante. 3. La guerra como herramienta­ social, ideológica y política para la solución de los conflictos de la sociedad, que de esta manera resultan solapados, por lo cual se observa la elevada recurrencia que mencionábamos. 4. El control y manipulación de las herramientas ideológicas en función de presentar una fachada de estabilidad y ejercicio Democráti­co del Estado de Derecho, a partir de la represión, criminalización e invisibilización de toda forma de protesta social.
Aunque la ecuación campo-ciudad se ha revertido desde finales de la década del 40` del siglo XX, eta­pa cuando la violencia política, económica y social se agudizó, la guerra conserva su virulencia en un país altamente urbanizado (80%).
De poco sirvió tener una nue­va Constitución política en 1991, precedida de pactos y acuerdos de paz con importantes sectores de la insurgencia. Los hechos demues­tran una política de exterminio de la oposición, sea cual fuere su origen y su credo político; surgió, con apoyo y permisividad oficial el paramilitarismo, aso­ciado de manera estructural al narcotráfico y a otras formas de economía legal e ilegal.
Pero es importante comprender que la eliminación física del ri­val político, económico, cultural o social, es una práctica de raigambre santanderista que la oligarquía colombiana utilizó y utiliza para conservar sus pri­vilegios de clase y el poder desde la época de Bolívar. Esa marca ha impactado a través de la historia tanto a la propia oli­garquía como al pueblo Colombia­no.
Veamos algunos hitos de esa historia:
25 de septiembre de 1828: intento de asesinato contra el Libertador Simón Bolívar.
4 de junio de 1830: Cae ase­sinado el Mariscal Antonio José de Sucre, crimen cometido por el que sería presidente de la Repú­blica de Colombia, General José María Obando.
12 de abril de 1859: Es asesinado con golpes de hacha en las escalinatas del Capitolio Nacional el general Rafael Uribe Uribe, líder socialista liberal y candidato a la presidencia, segui­dor de los postulados Bolivarianos y colaborador de Cipriano Castro.
9 de abril de 1948: Muere baleado el líder popular Jorge Eliécer Gaitán. La muerte de Gaitán marca el origen de la violen­cia política masiva y de clase y del conflicto armado que trans­curre hasta la actualidad y que fue propiciado, en sus comienzos, desde el gobierno del partido Conservador contra el campesina­do liberal, que se organizó como respuesta armada a la agresión. Siendo los primeros alzados en armas hombres valientes como Guadalupe Salcedo, Dumar Aljure, Jacobo Prias y otros mas quienes formaron las denominadas “Guerrillas Liberales”
Desmovilización de las Guerrillas en 1953
A raíz de los sucesos del 09 de Abril de 1948 y el asesinato del caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitan, se desató el período que se ha conocido en Colombia como el de “La violencia”, que llevo al país a extremos de crueldad, ultrajes, indignidad, despojos y desplazamientos nunca conocidos y que consecuentemente llevo a la clase dirigente política a entregar el poder a las Fuerzas Militares en cabeza del Comandante General para la época (1953), General Gustavo Rojas Pinilla.
Durante esos años, los Guerrilleros de diferentes grupos se habían consolidado y crecido considerablemente en número y regiones controladas, llegándose a afirmar que eran aproximadamente 15.000 combatientes los cuales hacían frente a 20.000 miembros de las Fuerzas Militares (Ejército, Armada y Fuerza Aérea) y 5.000 policías.
Esta poderosa guerrilla había consolidado su poder en algunas regiones, especialmente en los Llanos Orientales (oriente del país), en donde organizaron una “República Independiente” a cuya cabeza se encontraban caudillos quienes lograron encausar la violencia hacia otras razones diferentes al odio y la venganza, encontrando en “El poder popular” la razón de ser de su lucha.
Estos jefes Guerrilleros había planteado al anterior presidente de la República (Rafael Urdaneta) su disposición para llevar a cabo una negociación en la que se planteo como parte de sus peticiones una amnistía, libertad inmediata e incondicional para todos los presos de la guerrilla lo mismo que de los colaboradores de la misma, solución a la situación jurídica de los miembros de la Fuerza Pública que se habían sumado al alzamiento, indemnización a la población afectada, cese de la represión y dotar a los cabecillas y algunos seguidores de salvoconductos para el porte de armas de defensa personal.
Estas condiciones no fueron aceptadas por el presidente Urdaneta y la guerrilla siguió su curso, su crecimiento y su organización. Tan pronto asumió el poder, el General Rojas se propuso conseguir la pacificación del país y ofreció la amnistía a los guerrilleros de todos los movimientos que se encontraban en medio de la lucha armada y como muestra de voluntad de paz, ordenó a la fuerza pública el cese unilateral de hostilidades. Las guerrilleras se mostraron dispuestas y en los primeros días del mes de septiembre de 1953 ordenaron el cese de la lucha y presentaron un pliego de 17 puntos con las condiciones para deponer las armas.
Desde entonces los procesos y acuerdos de paz con los grupos in­surgentes, han sido objeto de trai­ciones y engaños que han concluido con la muerte de los líderes des­movilizados o amnistiados y el in­cumplimiento por parte del Gobierno oligárquico Colombiano de lo pactado. Veamos una cronología de estos acuerdos y procesos de paz, entre las cuales es importante señalar las siguientes:
Agosto y septiembre de 1953. Pri­mera desmovilización Guerrillera. Las primeras fuerzas guerrilleras que se habian formado en el Llano, el Tolima, Cundina­marca, el Eje Cafetero, el Mag­dalena Medio, Santander y Antio­quia, en número de 6.500 hombres y mujeres se acogieron a la propues­ta de amnistía formulada por el Gobierno del general Gustavo Ro­jas Pinilla. Los líderes Guada­lupe Salcedo, Jacobo Prías, Dumar Aljure, Eliseo “Cheí­to” Velásquez y muchos otros luego de entregar sus armas y deponer su actitud en contra del gobierno de turno fueron asesinados por el Servicio de Inteligencia Colombiano
Los alzados en armas solo solicita­ban del gobierno Nacional

  1. Reforma agraria democrática.

  2. Paz y cese de las operacio­nes militares contra la pobla­ción campesina.

  3. Apoyo a la productividad del campo y a la comercialización de sus cosechas.

  4. Que se destinara una suma de dinero suficiente para remediar la penosa situación económica que afrontaba la totalidad de los habi­tantes de las regiones afectadas por la violencia.

  5. Que el gobierno facilitara con plenas garantías el pronto retorno al país de los exiliados políticos.

  6. Que el gobierno decretara una ley de amnistía para los delitos políticos cometidos a partir del 9 de abril de 1948.

  7. Que el gobierno garantizara al pueblo de Colombia el pleno goce de los derechos ciudadanos colectivos consagrados en nues­tra Constitución.

  8. Política internacional in­dependiente y de paz. Defensa de la soberanía nacional.

  9. Instrucción y cultura para el Pueblo.

  10. Justicia eficaz y liberta­des democráticas.

  11. Libertades democráticas para el pueblo-

  12. Plena libertad de prensa, de asociación, de re­unión y de palabra.

  13. Libertad de organización para los trabajado­res y reconstrucción del movi­miento obrero y campesino sobre el principio de la unidad sindi­cal.

  14. Amnistía e indultos a los guerrilleros, como medida para propiciar su entrega.
Luego de asesinados todos sus lideres la guerrilla desmovilizada se dedicó a labores productivas y, ante el incumplimiento de lo acordado por el Gobierno de Rojas Pinilla, debió reiniciar su auto­defensa desde noviembre de 1955 cuando sufrió una nueva agresión militar. El Gobierno de Rojas Pinilla fue derrocado por una alianza entre los partidos Liberal y Conserva­dor, quienes inauguraron un perío­do denominado “Frente Nacional”, la versión colombiana del “Pacto de “Punto Fijo” en Venezuela. La amnistía fue decretada por Alberto Lleras Ca­margo, primer presidente de esa etapa.
El espíritu de esta amnis­tía era el “olvido” de las causas sociales, políticas, culturales y económicas del conflicto y, an­tes que una satisfacción a las víctimas fue un instrumento de legitimación de las oligarquías liberal y conservadora enfrenta­das. “Las urgencias del presente pesaban más que las necesidades del pasado”, señaló Camilo To­rres al respecto.

La desmovilización de las gue­rrillas fue consecuencia de un acuerdo de cúpulas, lo que dejó sin soporte político e ideológi­co y sin apoyo logístico a los grupos insurgentes que permanecían bajo la influencia del par­tido liberal burgués. Estos de­gradaron hacia el bandolerismo, atacando a sus propias bases so­ciales durante la parte final de la década del 50’ e inicios de los 60’. Otro sector asumió po­siciones de cuestionamiento al Estado burgués, representado por el Frente Nacional, y aceptó el apoyo político y organizativo de los sectores obreros.

La respuesta del gobierno fue ex­cesiva y sangrienta. Los desorien­tados en ese entonces llamados "Bandoleros" fueron utilizados como grupos de choque contra sus hermanos campesinos y luego caza­dos como fieras. No importaba la posibilidad de capturar y sancio­nar, predominaron los métodos de exterminio en cacerías a muerte, que incluyeron a los familiares, esposas e hijos menores. Los cadá­veres se exhibían públicamente a manera de escarmiento, alli el paramilitarismo aun no conocido era igualmente representado por personajes famosos como el llamado “Sangrenegra"

El impacto de esta etapa en el inconciente colectivo fue pro­fundo. Desde entonces el asesinato y la eliminación física del rival se “naturalizó”, hecho que se refleja, actualmente, en la aceptación pasiva de la barbarie militar y paramilitar. La oligar­quía sembró en el ideario popular un sentimiento de minusvalía y terror frente al hecho político cuestionador de la oligarquía, frente a la ira de los poderosos, en fin, frente a la acción de los aparatos represivos del régimen capitalista. La única opción para sobrevivir al hecho político es, desde entonces, la alternativa que brinda la protesta armada.

Luego de asesinados todos sus lideres la guerrilla desmovilizada se dedicó a labores productivas y, ante el incumplimiento de lo acordado por el Gobierno de Rojas Pinilla, debió reiniciar su auto­defensa desde noviembre de 1955 cuando sufrió una nueva agresión militar. El Gobierno de Rojas Pinilla fue derrocado por una alianza entre los partidos Liberal y Conserva­dor, quienes inauguraron un perío­do denominado “Frente Nacional”, la versión colombiana del “Pacto de “Punto Fijo” en Venezuela. La amnistía fue decretada por Alberto Lleras Ca­margo, primer presidente de esa etapa.

“En Colombia -dijo Jacobo Arenas, Comandante de las FARC-, es más fácil fundar un frente guerrillero que un sindicato”.

El reinicio de la guerra de guerrillas en los años sesenta. El factor insurgente campesi­no, que asumió la alianza con los sectores obreros, intentó esta­blecer zonas de autodefensa y de­sarrollo en las regiones de “Mar­quetalia”, “El Pato”, “Río Chiquito y Guayabero”, en el centro sur del país, simultáneamente adelanta­ban su cualificación política para superar la etapa de tute­la liberal, para asumir una pro­puesta de transformación social para el país.

El gobierno de Guillermo León Valencia lanzó operativos milita­res, en los marcos del Plan LASO (Latinoamerican Security Opera­tion), con el apoyo del gobier­no de EEUU, contra las regiones campesinas en la que actuaban los movimientos de autodefensa que nada tenian que ver con las hoy conocidas Autodefensas unidas de Colombia (AUC). Coin­cidentemente, en esta época la Revolución Cubana sacude el con­tinente, lo que motiva revolucio­nariamente a amplios sectores de las capas medias. Estos dos fac­tores dan lugar al nacimiento de nuevas organizaciones guerrille­ras móviles que expresan, de un lado la alianza obrero campesina, y de otro, el ímpetu revoluciona­rio de las capas medias dirigien­do sectores campesinos. Hablamos de las FARC, el ELN, el EPL.

En esta fase inicial de guerri­llas políticas móviles caen aba­tidos dirigentes de la talla de Ciro Trujillo, el sacerdote Ca­milo Torres, los hermanos Vásquez Castaño y Pedro Vásquez Rendón.

La respuesta al auge de los mo­vimientos insurgentes durante las décadas de los 60’ y 70’, por par­te de EEUU fue la instrumentación de la “Doctrina de la Seguridad Nacional”, cuyo concepto central era el de “enemigo interno”, que a partir de la vieja concepción del “Enemigo militar” hacía de­rivar el concepto regresivo del enemigo de clase.

Y finalmente, en esta fase, en 1970 ocurre el desconocimiento del triunfo elec­toral del ex dictador Gustavo Ro­jas Pinilla por parte del bipar­tidismo liberal conservador, lo que dio origen al “Movimiento 19 de Abril M-19”.

Amnistía General de 1984 El Gobierno de Belisario Betan­cur Cuartas fue impulsor de ges­tiones de paz con los movimien­tos armados, como respuesta a la presión popular que se había ex­presado en poderosos Paros Cívi­cos Nacionales en 1977 (Gobierno de López Michelsen) y 1981 (Ges­tión de Turbay Ayala), así como un agudizamiento de la actividad guerrillera. El temor fundamental que motivó a la oligarquía en este período de “Búsqueda de la paz” fue la inminente coinci­dencia, en la lucha, de los re­volucionarios campesinos y las luchas urbanas y obreras.

La vía escogida fue el desarro­llo de pactos bilaterales de cese al fuego, así:

  1. Con las FARC se firmó el acuerdo de La Uribe. El pacto in­cluyó reformas sociales, reforma agraria, garantías para la rein­corporación social y política, favorabilidad política para el nacimiento de una nueva organi­zación pacífica que permitiera la progresiva inserción de los alzados en armas. Así nació la Unión Patriótica (UP) en 1985.

  2. Con el M-19 y el EPL el pacto bilateral acordó sendos diálogos nacionales para un nue­vo pacto social y político que debía desembocar en una Asamblea Nacional Constituyente.
Cabe destacas que las organizaciones ELN, PRT, MIR-Patria Libre y el Mo­vimiento Armado Quintín Lame no aceptaron la amnistía.

Pero este nuevo panorama chocó con los intereses de los factores internacionales, mientras los gremios económicos oligárquicos se negaron a hacer concesiones económicas, políticas y sociales a la insurgencia, para aclimatar la paz. Los militares agredieron los campamentos de los guerri­lleros en tregua. Fueron asesi­nados 70 amnistiados. Se atentó contra Antonio Navarro Wolf del M-19, fue asesinado el vocero del EPL, Oscar William Calvo, mataron al dirigente del M-19 Carlos To­ledo Plata, entre muchos otros. Con ello se perdió la oportunidad de lograr los cambios necesarios para el progreso nacional.

El 6 de noviembre de 1985 un co­mando guerrillero del M-19 toma el Palacio de Justicia, con la intención de juzgar a Belisario Betancur por el incumplimiento de los acuerdos de paz y reinser­ción, y llevarse a los magistra­dos a otro país. En ese edificio funcionaba, además, de la Corte Suprema de Justicia, el Conse­jo de Estado. Ambos organismos venían cuestionando seriamente, desde el punto de vista jurídi­co la aplicación el Colombia de la Doctrina de Seguridad Nacio­nal que convirtió las Fuerzas Ar­madas del Estado en verdugos de su propio pueblo. El generalato desconoció la autoridad del Pre­sidente y en una política de tie­rra arrasada retomó las insta­laciones, causando un holocaus­to del cual no hay responsables. Se perdió allí lo mejor y más progresista de la jurisprudencia colombiana del siglo XX, junto a medio millar de inocentes.

En 1986 el nuevo gobierno de Virgilio Barco Vargas intentó firmar con las FARC un protocolo de ratificación que no progresó. Es entonces cuando las organiza­ciones FARC, ELN, M-19, EPL, PRT, Quintín Lame y MIR-Patria Libre, crean la Coordinadora Nacional Gue­rrillera “Simón Bolívar” en 1987.

Acuerdo de paz y reinserción del M 19. En 1990, durante el gobierno de Virgilio Barco Vargas se firma el acuerdo de paz y reinserción, am­nistía e indultos con el M-19. Un total de 800 combatientes entre­gan sus armas. Quizás el factor que coadyuvó, principalmente, a la rup­tura del esfuerzo unitario deno­minada “Coordinadora Nacional Gue­rrillera “Simón Bolívar”, fue el M-19, que había perdido dirigentes de la talla de Jaime Bateman, Iván Marino Ospina, Álvaro Fayad, que encarnaban la opción clasista de la organización, y se encontraba bajo la dirección de Carlos Pizarro, An­tonio Navarro Wolf y el equipo que condujo la pacificación y entre­ga de este grupo revolucionario. Carlos Pizarro fue posteriormente asesinado, mientras Antonio Navarro ocupó altos cargos en el gobierno de Cé­sar Gaviria Trujillo.

Acuerdos de paz con el EPL, el PRT y el Movimiento Armado Quintín Lame en 1991. El delirio represivo de los años 80-90’ arrojó cuatro can­didatos presidenciales asesina­dos, estos fueron: Jaime Pardo Leal y Bernar­do Jaramillo de la Unión Patrió­tica, Carlos Pizarro León Gómez del AD-M19 y Luis Carlos Galán Sarmiento del Nuevo Liberalis­mo. Igualmente fue liquidada una generación de dirigentes medios de la organización Unión Patrió­tica, que provenían del Partido Comunista Colombiano, del Movi­miento Amplio Colombiano y otras organizaciones. 6.000 hombres y mujeres fueron abatidos, en un hecho condenado expresamente por la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y la Comisión Interame­ricana de Derechos Humanos. Has­ta ahora no hay culpables.

En este clima de terror firma­ron acuerdos de paz, durante el año de 1991 y bajo el gobierno de César Gaviria Trujillo, las orga­nizaciones Quintín Lame, PRT y EPL. La mayoría de los milicianos rein­sertados de esta última organiza­ción pasaron a integrar la policía política del gobierno burgués.

Pero la oligarquía y su régi­men aprovechan la derrota popu­lar para convocar la Asamblea Nacional Constituyente de 1991, que consagró una nueva Carta Mag­na de corte neoliberal, pero con un bellísimo capítulo dedicado a los “Derechos Humanos”. Simultá­neamente al inicio de las deli­beraciones de la ANC las fuerzas militares bombardearon la Casa Verde, sede de la Comandancia de las FARC, con lo cual rompían la tregua y las conversaciones de paz de Caracas y Tlaxcala entre esta organización revolucionaria y el gobierno Colombiano.

Conversaciones de paz y despeje de la zona del Caguán Entre los años 1999 y 2002 las FARC y el Gobierno de Andrés Pas­trana Arango adelantaron conversa­ciones en San Vicente del Caguán, Caquetá. Según el Gobierno, un to­tal de 117 atentados terroristas atribuidos a las FARC, entre el 20 de enero y el 20 de febrero de 2002, justificaron la decisión presidencial de terminar con este laboratorio de paz, al que se su­maron cuatro gobiernos extranje­ros y gran número de organizacio­nes sociales colombianas.

Pero, el 20 de noviembre de 1998, cuando el Presidente Pas­trana decretó la zona de despe­je en cinco municipios con área de 42.000 Km2 nunca se acordó un cese al fuego, ni las FARC fueron obligadas al desarme, ni renun­ciaron a actuar con las comunida­des. Las FF.AA del Estado siempre acariciaron la idea de cercar a la dirigencia guerrillera para exterminarla, en contubernio con las fuerzas paramilitares y la asesoría del Pentágono.

Esta última oportunidad para la paz demostró, una vez más, que la alianza entre el imperio Norte­americano y la oligarquía colom­biana apuestan por el sojuzga­miento del pueblo, que su versión de la paz no incluye la justicia social ni la equidad económica, pero quiere ver a sus oponentes políticos muertos o emigrados. Y el pueblo aún no acumula la fuer­za social y política necesaria para quebrar esta voluntad.

Podemos afirmar que la paz de­bió iniciarse hace casi tres mi­llones de muertos, parodiando a un Comandante guerrillero.

La evolución de los acuerdos de paz entre insurgentes y el gobier­no colombiano permite vislumbrar el fenómeno de la guerra, pero disfraza sus causas. Sumirnos en el recuento de los acuerdos in­cumplidos sólo nos lleva a ocul­tar las razones que dieron origen al conflicto y, fundamentalmente, facilita que se nos presente el problema político, social, econó­mico y cultural como la confron­tación entre el Gobierno de un Estado asediado, contra unas vo­ces, insurgentes ayer, “terroris­tas” hoy, “renuentes a cualquier salida en los marcos del diálo­go”, vertiente que ha querido im­poner la clase política dominante colombiana y que sustenta la mal llamada "Seguridad democrática".

La dinámica de la guerra en Co­lombia presenta una fuerte con­notación de clase. En su génesis intervienen factores relaciona­dos con la acumulación primaria, la creciente monopolización eco­nómica, la hiper-concentración de la tierra en manos de latifun­distas, la naturaleza dependiente del régimen político y económi­co neogranadino, el carácter de­lincuencial de la clase política oligárquica, la ausencia de vías de participación y expresión po­líticas alternativas al estable­cimiento, la criminalización de la protesta social, entre otros. La burguesía Colombiana se ha caracterizado por no reparar en medios para alcanzar su objetivo primario, la acumulación de ri­queza.

La lógica de implantación de la guerra es producto, en pri­mer lugar, de la naturaleza de la acumulación de los grandes capi­tales colombianos, que han sabido manejar estrategias y prácticas legales e ilegales (delincuen­ciales), desde cuando el imperio español impuso las restricciones al comercio que auspiciaron el contrabando, luego en la extrac­ción y venta clandestina de es­meraldas a los mercados interna­cionales –principalmente Estado­unidense-, posteriormente en la participación como elemento fi­nanciero y el lavado de capitales en los casos de la “Bonanza Marimbera”, el circuito de la co­caína y el más reciente desarrollo de la industria de la heroína con destino a los EE.UU y Europa. De esta conducta delincuencial surgió un comportamiento mafioso que se filtró desde la oligarquía colom­biana y ha contaminado importantes sectores de las clases medias.

En segundo lugar, la presencia de altos niveles de concentra­ción en sectores completos de la economía, convertidos en mo­nopolios, que en su dinámica de acumulación se han transformado, producto de fusiones y alianzas, en conglomerados económicos, lo cual ha tenido en lo polí­tico su expresión correspondiente al privilegiar la salvaguarda de los intereses, principalmen­te, frente a lo que consideran el enemigo principal, las clases populares. Cabe anotar que los capitales ilícitos han sido per­manentemente incorporados a la economía lícita bajo la figura de “Amnistías tributarias”. Con esta figura se facilitó el blan­queo de capitales que favorecie­ron la concentración monopólica y los conglomerados económicos. Se cierra el círculo económico, se restringen las libertades po­líticas y sociales.

En tercer lugar, el papel fun­damental que desde el nacimiento de la República de Colombia ha jugado el imperio Estadouniden­se. La diplomacia y la conducta política y comercial de los EEUU determinaron que los presupues­tos de la relación entre el Es­tado (como aparato de coerción y control social) y la burguesía, con los sectores populares, en especial el Campesinado rebelde y la clase obrera organizada, si­guieran la orientación represiva y genocida de las doctrinas impe­riales.

De allí la adopción de la Doctrina Contrainsurgente de la Seguridad Nacional que convirtió al pueblo en el “Enemigo inter­no”, para la aplicación de los planes LASO (1964), ANDES (1968), Manual Para el Planeamiento de la Seguridad Nacional (1974), Estra­tegia Nacional Contra la Violen­cia (1991), Plan Colombia (1998) devenido después en "Plan Patrio­ta", que durante el gobierno de Álvaro Uribe Vélez se ha denominado ”Plan de Seguridad Democrática” Todos generados desde el Pentá­gono y el Departamento de Estado, argumentados con la premisa del combate a unos delincuentes que supuestamente perdieron sus con­tenidos ideológicos e incluso alegando la lucha contra el Narcotráfico.

Lo novedoso de la “Estrategia de guerra Uribista” consiste en negar el conflicto social, polí­tico, económico, cultural y mi­litar, pero aplicar la guerra de exterminio para imponer la eco­nomía mafiosa que lo ha escogido, bendecido y legalizado, como su principal exponente. El desarro­llo de lo que Uribe denominó “Plan de Seguridad Democrática” incre­mentó y oficializó la presencia directa de asesores y tropas del Ejército de EEUU y de empresas de mercenarios de guerra, situación que tambien heredo pero que después auspicio en una es­calada que intenta cubrir con la hoja de parra de doctrinas Norteamericanas como la de la “Guerra Preventiva” o “Doctrina Bush”.

La dinámica militarista Norte­americana, a través de Uribe, ame­naza con regionalizarse y el mejor ejemplo fue la re­ciente violación de la soberanía Ecuatoriana por parte del gobier­no Colombiano y que desnuda los esfuer­zos del Departamento de Estado y el Pentágono por involucrar a la región en el conflicto interno Neogranadino, pero también es un globo de ensayo para preparar las condiciones de una intervención militar directa contra el proceso integracionista que lidera el presidente Hugo Chávez, bien sea directamente en Venezuela o mediante una conflagración regional, pero eso no solo ha quedado allí puesto que hemos visto como de manera flagrante y descarada fue sacado de su país (Honduras) el presidente Manuel Zelaya, hecho consumado a través de un golpe de estado que sin dudas fue orquestado y dirigido por la Central de inteligencia Norteamericana y el Pentágono (CIA).

Concluyamos pues, y entendamos que los objetivos del imperio son sobreponerse a la crisis económico social que atra­viesa y que le pone en desventa­ja frente a potencias emergentes que amenazan su hegemonía; romper con los procesos sociales progre­sistas que avanzan en la región (Revolución Ciudadana, Revolución Bolivariana, Sandinismo, quebrar el avance popular en Bolivia, Ecuador, y en otros paises, pero su principal objetivo es quebrar la integración Latinoamerica­na; con ello derrotar a la insurgencia Co­lombiana sin ceder un ápice a sus demandas y a las causas del con­flicto histórico que se desarro­lla en ese país. Por eso un ré­gimen, como el que encabeza el presidente Uribe, y un sistema que se sostiene en la guerra, en el Paramilitarismo y en la mafia, todos esos elementos convierten a Colombia en un anacronismo necesario para desestabilizar toda la región.

La superación de ese anacronismo se convierte en un objetivo táctico regional, lo cual ya se ha puesto en marcha luego de la interpelación a la cual fue objeto el presidente Uribe en Argentina y en donde se dejo clara y categóricamente establecido el rechazo de todos los países de America del Sur en contra de las bases de la muerte que permitirá instalar su gobierno en territorio Colombiano.

Por eso vemos como la UNASUR se ha fortalecido y de manera estratégica también algunos gobiernos a la medida de lo posible estan haciendo esfuerzos para fortalecer sus Fuerzas Armadas, adquiriendo equipos de ultima generación, tal es el caso de Brasil, Ecuador y Venezuela, no con la intencion de agredir a otros paises hemanos sino para defender el sagrado suelo Patrio, puesto que a partir del momento en que se instalen las tropas Norteamericanas en Colombia esos paises serán su objetivo, y no por la entupida idea de erradicar el ideal Bolivariano y Socialista auspiciado por el Comandante Chavez, sino porque es alli donde se encuentran las mayores reservas naturales, las inmensas cuencas hidrográficas y la mas amplia Bio-diversidad del Planeta. Eso es lo que atrae al vil y canalla Imperio a nuestra America.


¡No nos equivoquemos Compatriotas, porque esa es la pura verdad!


sábado, 3 de octubre de 2009

2033: LA LUCHA POR EL AGUA

 
Desde el inicio Dios nos regalo el más hermoso sitio para que pudiéramos vivir, disfrutar y procrear. Hizo fuertes y sabios a algunos, pero nos rodeo por igual de una inmensa variedad de animales y plantas. Dejo en nuestras manos Ríos y Mares cristalinos, Montañas, Selvas, Valles, Sabanas y muchas cosas mas. En cada rincón del Planeta dejo vida como prueba de su amor hacia nosotros.

Lamentablemente como especie humana no hemos cuidado lo que nos fue entregado y por el contrario hemos contribuido a su destrucción y exterminio. Contaminando todo lo que a nuestro alcance se encuentra y auspiciando con ello al deterioro del Medio ambiente.

Según datos del PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo), la escasez del agua provoca la muerte de varios millones de niños al año. La mala gestión de los Estados hace que 1.500 millones de habitantes carezcan de ese derecho.

Precisamente las grandes potencias ya se están posesionando en nuestra America con el fin de sustraer y apoderarse del preciado líquido al estar en conocimiento de que nuestros países cuentan con las mayores cuencas hidrográficas de agua dulce del Planeta.

Desde hace años, cada cierto tiempo, surge tímidamente una voz que pretende avisarnos que en un futuro cercano las cruentas guerras originadas por el petróleo quedarán olvidadas en el pasado; y sin embargo no será porque se haya solucionado el problema energético del planeta, sino porque otro problema aun mayor nos amenazará.Este nuevo problema no amenazará con hacernos retroceder 50 años en el tiempo si no somos capaces de atajarlo a tiempo, no nos devolverá a la era pre-tecnológica, este problema de escasez amenazará nuestra propia existencia.

El agua, un bien muy escaso en el planeta y poco apreciado en el llamado primer mundo, empezará a escasear incluso ya existen regiones en el planeta donde ese preciado liquido no existe, los distintos pueblos, las grandes empresas y los gobiernos comenzarán a situarse en uno de los dos únicos bandos que se crearán; los que tienen el agua y luchan por preservarla para comercializar a precio de oro su excedente, y frente a ellos, los que carecen de suficiente agua para mantener a su pueblo y están dispuestos a conseguirla a cualquier precio.

El agua, objetivamente, es un bien natural común, vital e insustituible. Sucede que vivimos en una época histórica en la que el modo de producción dominante hoy globalizado transforma en mercancía literalmente todo, hasta las cosas más sagradas y vitales. Los derechos humanos inalienables son rebajados a necesidades humanas. Para satisfacerlas hay que obedecer a las leyes de la oferta y la demanda, propias del mercado. Sólo tiene derechos quien pueda pagar y sea consumidor, y no quien es persona, independientemente de su condición económico-social. Es una traición a los ideales de la modernidad.

El agua dulce, por ser un bien cada vez más escaso cada vez se cotiza más y se transforma en objeto de la codicia mundial. Hoy existe una carrera frenética entre grandes multinacionales para privatizar el agua, transformarla en recurso hídrico y en mercancía con la que se puede ganar mucho dinero. Se ha cuidado de deshacer la comprensión humanística y ética de que el acceso al agua es un derecho humano fundamental. Se ha conseguido reducirla a una necesidad como cualquier otra, cuya satisfacción debe ser encontrada en el mercado. Fue lo que efectivamente declaró el Segundo Foro Mundial del Agua en el año 2000: el agua ya no es un derecho inalienable sino una simple necesidad humana.

Ahora ha comenzado una guerra encarnizada por el control del acceso al agua potable. Quien lo controle tendrá poder poder de vida o muerte sobre millones y millones de personas. Hoy 1.600 millones de personas tienen grave insuficiencia de agua y en el año 2020 serán ya 3.000 millones de una humanidad con 8.000 millones de personas. Éstas podrán ver negado el acceso al agua porque no tendrán cómo adquirirla y estarán en peligro de muerte.

Las estimaciones hechas por los científicos nos dicen que para el año 2025 (apenas 15 años) la demanda de este elemento tan necesario para la vida humana será un 56% superior que el suministro... y quienes posean agua podrían ser blanco de un saqueo forzado. Se calcula que para los 6.250 millones de habitantes a los que hemos llegado, se necesitaría ya un 20% más de agua. La pugna es entre quienes creen que el agua debe ser considerado un bien comerciable (como actualmente lo son bienes básicos como el trigo, el arroz...) y quienes expresan que es un bien social relacionado con el derecho a la vida. Los alcances de la soberanía nacional y las herramientas legales son también parte de este combate.Solo el 3 % del agua del planeta es agua dulce, y de ese porcentaje, solo el 0.4 % es agua superficial o atmosférica, o lo que es lo mismo, accesible, y por si fuera poco, la mitad de los grandes ríos del planeta ven año a año disminuido su caudal o bien presentan grandes signos de contaminación.

De hecho, a día de hoy, 1500 millones de personas no tienen acceso al agua potable... pero por suerte o desgracia para la paz mundial, esos 1500 millones de personas vienen a ser las mismas que tampoco tienen un acceso directo al restos de bienes básicos para garantizar la propia existencia como son, por ejemplo, el trigo y el arroz antes mencionados.Son el tercer mundo, no tienen armas, no tienen fuerza política, no tienen voz, no le importan a los ricos ni a las grandes potencias, pero estas a cambio comenzaran a pugnar para apoderase del agua.

Más de 2.200 millones de habitantes de los países subdesarrollados, la mayoría niños, mueren todos los años de enfermedades asociadas con la falta de agua potable, saneamiento adecuado e higiene. Además, casi la mitad de los habitantes de los países en desarrollo sufren enfermedades provocadas, directa o indirectamente, por el consumo de agua o alimentos contaminados, o por los organismos causantes de enfermedades que se desarrollan en el agua.

Con suministros suficientes de agua potable y saneamiento adecuado, la incidencia de algunas enfermedades y la muerte podrían reducirse hasta un 75 por ciento. Las grandes potencias de manera muy inteligente vienen aplicando una estrategia silenciosa de apropiacion territorial de los recursos naturales, esto lo vienen realizando mediante la compra de tierras con recursos naturales (agua, biodiversidad), sin descartar el conflicto militar o apropiación por la fuerza de esos recursos. Esta última, nos transporta a la guerra en Irak (Marzo 2003) y la apropiación por parte de las grandes petroleras estadounidenses de los recursos Iraquíes. No se descarta que con esa guerra hayan querido controlar los recursos hídricos de los ríos Eufrates y Tigris... ríos caudalosos en una de las zonas más áridas del planeta.

A solo pocos años de que esas cifras se materialicen, ya se pueden apreciar los cambios y los movimientos perezosos de los distintos países para poco a poco preparar el apoderamiento de Ríos, lagos y de todas las cuencas de agua dulce existentes en el mundo y especialmente en Latinoamerica.En el año 2000, en la Haya, Holanda, 160 gobiernos acordaron que el agua sería una necesidad humana y no un derecho del hombre; cuidado con la semántica, esta diferenciación no es casual, se puede hacer negocios a costa de las necesidades humanas, pero no a costa de los derechos humanos.Y como no, tampoco pierden tiempo las distintas empresas que ven en este futuro, no un reto para la humanidad, sino una oportunidad. En los últimos años, por ejemplo, hemos visto a grandes corporaciones posesionándose en este mercado.

Las francesas Vivendi y Suez (clasificadas en los puestos 51 y 99 respectivamente en el Global Fortune 500 de 2001). La alemana RWE (en el puesto 53), que adquirió dos importantes empresas de agua, Thames Water en el Reino Unido y American Water Works, en Estados Unidos de Norteamérica.

Hemos visto también, grupos de inversión de riesgo adquiriendo los derechos de explotación de distintos glaciares. Pero uno de de esos ejemplos, el que pone el titulo a esta entrada y se lleva la palma, lo podemos observar en Argentina, particularmente en el río Paraná.La empresa estadounidense Makhena SA con sede en Miami y sucursal en Buenos Aires es la propietaria de la marca de agua embotellada Gold Spring.

Lo particular de este caso es sin duda el método de extracción de este agua. Cualquier buque, para navegar y mantener su flotabilidad y equilibrio necesita ser lastrado con agua. Esta empresa actúa de la siguiente manera; aprovecha su presencia en la zona para importar a Argentina todo tipo de productos a través del rió Paraná, pero su negocio no está solo en en transporte de esos productos. Una vez depositados en puerto los productos, sus buques son lastrados a su máxima capacidad con agua directamente obtenida del río Paraná, un agua que una vez sacada del país es transportada, potabilizada y vendida en los mercados de Medio Oriente, África y Europa en envases con la marca "Gold Spring"

El negocio es redondo, obtienen el agua de manera totalmente gratuita y la venden al mejor precio y con las mejores referencias de origen posibles. Un buque cargado de agua dulce con capacidad para 70 mil toneladas, puede vender ese mismo agua por 2 millones de dolares en el desabastecido Oriente Medio, sin siquiera necesitar embotellarla.
Y todo esto lo hacen ante la mirada atónita y el conocimiento de lo que ocurre de las propias autoridades portuarias que no tienen medios jurídicos para actuar contra este trafico ilegal de agua.

La fatalista predicción de que comenzaríamos a robarnos unos a otros algo tan básico como el agua ha comenzado a hacerse realidad en el Rio Parana.

Tan fatalista predicción se hace realidad también cuando vemos como el Imperio Norteamericano ha comenzado a mover sus piezas anclando a sus Marines en suelo patrio Colombiano, todo en plan simulado y estrategico que primero tendrá como objetivo desestabilizar la región y hacer caer a todos los gobiernos Nacionalistas y defensores de nuestros recursos naturales, hecho esto vendrá un silencioso apoderamiento y control de los Gobiernos de esos países, que por cierto contienen los mas inmensos ríos y lagos del Mundo. Nadie dude en reconocer que dentro de poco seremos la única parte del mundo que tendrá agua dulce.

Quizás en tan corto tiempo nos daremos cuenta que un par de locos no estaban tan equivocados cuando nos alertaban sobre la fatalistica predicción auspiciada por los grandes Imperios comandados por los Estados Unidos, el cual solo podrá lograr su objetivo al contar con la complicidad de gobiernos complacientes, traidores y vende Patria.

Es nuestra obligación controlar la utilización inadecuada de este vital líquido. Además de reducir su uso en auto lavados y en el riego de jardines, es de vital importancia evitar verter el aceite desechado por las cañerías, ya que ello contribuye a la contaminación de nuestros ríos y fuentes de agua. Los gobiernos del mundo deben implementar de inmediato como política de Estado, el tratamiento de las aguas residuales antes de que estas caigan a los ríos, mares, lagos y lagunas.

Recordemos que nuestra única y hermosa nave espacial llamada Tierra simplemente se la hemos pedido prestada a nuestras futuras generaciones...

¡No les defraudemos!





INGLES

From the beginning God gave us the most beautiful place so we could live, enjoy and procreate. He made some strong and wise, but we equally rodeo a huge variety of animals and plants. I leave in our hands crystalline rivers and seas, mountains, forests, valleys, Linens and much more. In every corner of life left Metro to prove his love for us.

Unfortunately as humans we do not care what was presented to us and instead have contributed to their destruction and extermination. Contaminating everything within reach and hosting is thus the deterioration of the Environment.

According to the UNDP (United Nations Development Program), shortage of water causes the death of several million children a year. The mismanagement of the States makes that 1,500 million people lack that right.

Precisely because the great powers are possessed in our America to remove and seize the precious liquid to be aware that our countries have the largest freshwater river basin on the planet.

For years, every so often, a voice emerges timidly seeks to tell us that in the near future the bloody wars caused by oil in the past be forgotten, and yet because it has not solved the world's energy problem, but because another even bigger problem we amenazará.Este new problem not threaten to take us back 50 years time if we fail to tackle it in time, we do not return to pre-technological era, this problem of shortage will threaten our very existence.

Water, a scarce commodity on the planet and unappreciated in the so-called first world, will become scarce and there are even regions in the world where there is this precious liquid, different peoples, corporations and governments start to stand on one of only two sides to be created, those with the struggle to preserve water and to market gold price of its over, and before them, those without enough water to keep your people and are willing to get to any price.

Water, objectively, is a common natural asset, vital and irreplaceable. It happens that we live in a historical era in which the dominant mode of production becomes a commodity today globalized literally everything, even the most sacred and vital. Inalienable human rights are written down to human needs. To meet them we must obey the laws of supply and demand, the market itself. Just who can pay and rights as consumers, and not who is a person, regardless of their socioeconomic status. It is a betrayal of the ideals of modernity.

Fresh water, being an increasingly scarce traded increasingly more and becomes an object of global greed. Today there is a frantic race among large multinationals to privatize water, water resource and transform it into a commodity with which they can earn much money. Care has been taken to undo the humanistic and ethical understanding that access to water is a fundamental human right. Have reduced to a need as any other, whose satisfaction must be found in the market. It was actually stated what the Second World Water Forum in 2000: water is no longer an inalienable right but a simple human need.

Has now started a bitter war for control of access to drinking water. Who have power control the power of life and death over millions and millions of people. 1,600 million people today have a serious shortage of water in 2020 and 3,000 million will be a humanity with 8,000 million people. They may see denied access to water because they will not how to purchase and are in danger of death.

Estimates made by the scientists tell us that by the year 2025 (only 15 years) demand for this element so essential to human life to be 56% higher than the supply ... and people with water could be targeted for looting forced. It is estimated that 6,250 million people of whom we have come, would be needed and 20% more water. The struggle is between those who believe that water should be considered a marketable commodity (as we currently are commodities such as wheat, rice ...) and who express that it is a social good about the right to life. The scope of national sovereignty and the legal tools are also part of this combate.Solo 3% of the planet's water is freshwater, and of that percentage, only 0.4% is surface water or air, or what is the same accessible, and last but not least, half of the great rivers of the world every year are decreased flow or present major signs of contamination.

In fact, today, 1500 million people lack access to safe drinking water ... But fortunately or unfortunately for the world peace, those 1500 million people come to be the same as not having direct access to the remains of commodities to ensure their own existence as, for example, wheat and rice above. They are the third world, have no weapons, no political force, have no voice, no matter to the rich nor the great powers, but such a change began to strive to seize the water.

More than 2,200 million people in developing countries, mostly children, die every year from diseases associated with lack of potable water, adequate sanitation and hygiene. Furthermore, nearly half the population of developing countries suffer from diseases caused, directly or indirectly, by consuming contaminated food or water, or disease-causing organisms that develop in the water.

Adequate supplies of potable water and adequate sanitation, the incidence of some diseases and death could be reduced up to 75 percent. The great powers are cleverly using a strategy of appropriation silent territorial natural resources, this will come by land through the purchase of natural resources (water, biodiversity), including by military conflict or appropriated by the strength of those resources. The latter takes us to war in Iraq (March 2003) and appropriation by the U.S. oil majors Iraqi resources. Not be ruled out that the war had wanted to control the water resources of the Euphrates and Tigris rivers ... rivers in one of the driest areas of the planet.

Just a few years those numbers materialize, and you can see the changes and sluggish movements of different countries to gradually prepare the takeover of rivers, lakes and all freshwater basins in the world and especially Latinoamerica.En in 2000, in The Hague, Netherlands, 160 governments agreed that the water would be a human need and not a human right, careful with the semantics, this differentiation is not casual, it can do business at the expense of human needs, but not at the expense of the rights humanos.Y of course, lose no time to different companies who see this future, not a challenge to humanity, but an opportunity. In recent years, for example, we've seen large corporations taking possession in this market.

The French Vivendi and Suez (ranked in positions 51 and 99 respectively in the Fortune Global 500 of 2001). Germany's RWE (ranked 53), which acquired two major water companies, Thames Water in the UK and American Water Works in the United States of America.

We have also seen, risk investment groups acquiring the rights to exploit the various glaciers. But one such example, which puts the title to this post and takes the cake, we can see in Argentina, particularly in the river Makhena SA Paraná.La American company based in Miami and a branch in Buenos Aires is the owner Brand Gold Spring bottled water.

The particularity of this case is undoubtedly the method of extraction of this water. Any vessel, to navigate and maintain their buoyancy and balance needs to be weighed down with water. This company acts as follows; leverages its presence in the area to import to Argentina all sorts of products through the Paraná River, but their business is not only transportation of these products. Once deposited at the port of products, their ships are ballasted to its maximum capacity with water directly obtained from the Paraná River, a once water is transported out of the country, drinkable and sold in the markets of the Middle East, Africa and Europe in containers marked "Gold Spring"

The business is round, get the water completely free of charge and sell at the best price and best possible source references. A ship loaded with fresh water for up to 70 thousand tons, can sell the same water for 2 million dollars in the Middle East without supplies, without even needing bottled.

And all this is done to the astonishment and knowledge of what happens to the port authorities themselves have no legal means to act against illegal trafficking of water.

The fatalistic prediction that we would start to steal each other something as basic as water has started to become reality in the Rio Parana.

As fatalistic prediction comes true also when we see how the American Empire has begun to move their pieces anchoring his Marines in Colombian homeland, particularly in simulated strategic plan will aim first to destabilize the region and bringing down all national governments and defenders of our natural resources, a fact that will come a silent seizure and control of the governments of these countries, which certainly contain the most vast rivers and lakes in the world. No hesitate to recognize that soon we will be the only part of the world that will have fresh water.

Perhaps in such a short time we realize that a couple of fools were not so wrong when we warned of the fatalistic prediction is facilitated by the great empires led by the United States, which can only achieve its goal to count on the complicity of governments complacent , traitors and traitors.

It is our duty to control the improper use of this vital liquid. In addition to reducing car use in washing and garden watering is vital to avoid pouring waste oil down the drain, as this contributes to pollution of our rivers and water sources. Governments worldwide must immediately implement a State policy, treatment of waste water before they fall into rivers, seas, lakes and lagoons.

Recall that our unique and beautiful spaceship Earth we have simply borrowed from our future generations ...

They did not disappoint!